Se trata de un conjunto de doce preciosas cascadas y balnearios naturales que destacan por la inmensa belleza de su paisaje virgen. Los Saltos de Jima fueron declarados monumento natural en agosto del año 2009 con el fin de preservar y reconocer su gran importancia acuífera y la biodiversidad de la zona. Alrededor del monumento natural de los Saltos de Jima podemos encontrar una gran variedad de plantas nativas como higos, ciguas, sablitos, helechos machos, ceibas y espatodeas. En cuanto a la fauna de la zona, existe una enorme diversidad de especies animales, principalmente aves, como la cigua constanza, el barrancolí, el pájaro bobo, los pericos, entre otras. También han en esta zona anfibios y reptiles propios del bosque pluvial.